La Diputada Araceli García Muro presentó una reforma a la Ley de Salud
del Estado de Colima, relacionada a la donación de órganos y
trasplantes, toda vez que pocas personas conocen la Ley para el Fomento
de una Cultura de Donación, Procuración y Trasplante de Órganos, Tejidos
y Células y busca vincular normas que regulan estos nobles actos y dar
claridad a la ciudadanía.

Esta reforma pretende que se conozca que toda la gente de Colima somos
donadores tácitos; es decir, quienes no manifestaron su negativa a que
su cuerpo o componentes sean utilizados para trasplantes, siempre y
cuando también se tenga consentimiento de las personas señaladas como
disponentes secundarios, en los términos de la Ley General de Salud.

La presidenta de la Comisión de Niñez, Juventud, Adultos Mayores y
Discapacidad expuso que la situación actual nos motiva a promover con
mayor empeño la cultura de donación de órganos, además de perfeccionar
el modelo regulatorio vigente, para incorporar mecanismos que permitan
aumentar el número de personas dispuestas a mejorar la salud o salvar la
vida de otras mediante la donación.

Indicó que es plausible que en los últimos 5 años, la donación de
órganos y tejidos de personas fallecidas en nuestro país aumentó 28% y
hoy 7 de cada 10 mexicanos ven positiva la donación, sin embargo, señaló
que el desafío todavía es enorme, por la falta de correspondencia entre
número de donantes y número de pacientes que requieren de un trasplante.

El Centro Nacional de Trasplantes informó que durante el primer semestre
de 2019 hubo 22 mil 290 personas en espera de un órgano o tejido, de las
cuales 15 mil 939 esperan un riñón, en segundo lugar, 5 mil 988 para
córnea, en tercer lugar, 311 son de hígado, 37 son de corazón, 7 de
riñón-riñón, 2 de pulmón, 2 son de corazón-riñón, 2 de riñón-páncreas, 2
de hígado y 2 están en espera de un riñón.

La legisladora del Grupo Parlamentario de Morena dijo que para atender a
22 mil 290 personas que necesitan donaciones, no hay suficientes
donantes, por lo que urge aumentar incentivos que deriven en aumento de
personas dispuestas a donar sus órganos una vez que fallezcan.

García Muro explicó que la falta de donadores se debe a múltiples
causas, como desinformación y desconfianza en las instituciones; además
la incidencia de factores de naturaleza social, moral y religiosa juegan
un papel decisivo para que la cultura de la donación no se desarrolle al
ritmo que se requiere. La iniciativa fue turnada a la Comisión
respectiva para su análisis.